¿Qué es?
La enfermedad periodontal o periodontitis es una infección crónica de la encía, es decir, que lleva mucho tiempo enferma. Es de evolución lenta y destruye los tejidos que sostienen los dientes.
¿Qué es?
La enfermedad periodontal o periodontitis es una infección crónica de la encía, es decir, que lleva mucho tiempo enferma. Es de evolución lenta y destruye los tejidos que sostienen los dientes.
La enfermedad periodontal es ocasionada por la acumulación de placa dentobacteriana. Si esta placa no se retira adecuadamente con el cepillado, empieza a formar sarro. A esta fase se le llama gingivitis y se caracteriza por la inflamación y el sangrado de la encía. Su tratamiento es relativamente sencillo y con una visita al periodoncista puede detenerse su avance.
Cuando el sarro tiene mucho tiempo acumulado, la encía se separa del diente formando la bolsa periodontal y empieza a perderse gradualmente el hueso que sostiene al diente. En esta etapa deja de llamarse gingivitis y evoluciona para convertirse en periodontitis.
La periodontitis sigue avanzando a través de los años hasta que finalmente el diente se pierde. El avance por lo general es indoloro; en sus últimos estadios es cuando empieza a provocar molestias.
Dado que la enfermedad es ocasionada por bacterias y no es posible retirarlas con antibióticos o enjuagues, es necesario retirar mecánicamente toda la comida, sarro y bacterias que irritan la encía.
Después del diagnóstico, el tratamiento de la enfermedad periodontal se aborda de dos maneras, la primera mediante curetaje o raspado y alisado radicular, y la segunda, a través de la cirugía periodontal.
El mejoramiento de la higiene oral durante y después del tratamiento es indispensable para que cualquier tratamiento periodontal funcione.
Las personas mayores de 35 años pierden mayor cantidad de dientes por enfermedad periodontal que por caries. La mejor manera de prevenirla es mediante un buen cepillado realizado diariamente, el correcto uso del hilo dental y mediante la revisión y limpieza realizada por un periodoncista cada seis meses.
Estudios de investigación han demostrado que la gingivitis afecta casi a toda la población, tanto infantil como adulta. Aunque la periodontitis apenas afecta a los niños, uno de cada dos adultos mayores de 35 años la padece o la ha padecido.
La encía sana tiene una textura firme, es de color rosado pálido y cubre por completo la raíz del diente. Además, no presenta sangrado al cepillarse.
A diferencia de la caries dental, el tipo de alimentación no juega un papel importante en la salud de la encía. No obstante, ciertos alimentos como las frutas y verduras crudas, tienen un efecto de barrido sobre la placa dentobacteriana que evita que la encía se inflame.
Aunque el tabaco no es capaz de producir enfermedad periodontal por sí solo, sí agrava su evolución y reduce la eficacia del tratamiento ya que disminuye la capacidad defensiva de los tejidos de la encía frente a las bacterias.
Se pueden contagiar las bacterias de la boca, pero no así la enfermedad periodontal ya que esta requiere de un proceso infeccioso de evolución lenta donde entran en juego factores como el estado del sistema inmunológico y hábitos de higiene dental.
La enfermedad periodontal es una infección progresiva e indolora. Retrasar su tratamiento puede causar pérdida ósea y dental, mal aliento, sangrado de la encía y posiblemente la aparición de abscesos.
Estudios demuestran que las bacterias de la boca están relacionadas con el nacimiento prematuro y debajo peso en mujeres embarazadas. La enfermedad periodontal también está vinculada con un mayor índice glicémico en pacientes diabéticos y con una mayor propensión a sufrir accidentes cerebro vasculares e infartos.
Con frecuencia se cree que sí, sin embargo, no se ha probado. Ciertas etapas de la vida de la mujer que coinciden con cambios hormonales fuertes, como el embarazo y la menopausia, producen alteraciones pasajeras de la encía que requieren de un cuidado especial.
No todos los pacientes con enfermedad periodontal necesitan cirugía. Si se trata a tiempo, puede controlarse con tratamientos menos invasivos como los curetajes.
Los avances en el tratamiento de la periodontitis permiten tratar exitosamente casi todos los dientes. No obstante, cuando la enfermedad está muy avanzada y empiezan a presentarse signos como dolor y abscesos, indica que se encuentra en sus etapas finales, en cuyo caso, las opciones de tratamiento son limitadas.
Sí, siempre y cuando se controle la enfermedad periodontal primero. El tratamiento y su duración dependerá de cada caso particular.
Sí es posible regenerar el hueso alrededor de los dientes. Para ello se cuenta con biomateriales como huesos, membranas y proteínas; sin embargo, es un procedimiento delicado y con indicaciones específicas.