Tres aspectos a tomar en cuenta para el cuidado de los dientes

La salud bucodental depende de hábitos sencillos de higiene, como cepillarse los dientes y usar hilo dental. Sin embargo, hay otros aspectos que hay que tomar en cuenta para garantizar una salud bucodental óptima.

La dieta

La dieta juega un papel fundamental en la salud bucal. Cepillarse bien los dientes tres veces al día no podrá revertir los efectos de los malos hábitos alimenticios. En lo que se refiere a caries y cavidades en los dientes, la clave está en la frecuencia a la exposición al azúcar.

Hay azúcares escondidos en alimentos que nunca esperarías, por ejemplo, la leche. Algunos niños se quedan dormidos con el biberón en la boca o no se cepillan los dientes después de consumir leche, lo que contribuye a la formación de caries tempranas en los niños.

Beber mucha agua ayuda a remover los compuestos sulfúricos que se generan en la cavidad oral y causan el mal aliento. También comer vegetales fibrosos con un alto contenido de agua como la zanahoria y el apio hace que la boca genere más saliva y remueva las bacterias.

Horario para comer

Parece lógico pensar que el mejor momento para cepillarse los dientes sea después de comer, pero es una idea equivocada.

Justo después de comer la boca se vuelve ácida. Si nos cepillamos los dientes inmediatamente, estaremos frotando los ácidos contra los dientes, haciendo que su efecto dañino sea más intenso y duradero.

El ácido desmineraliza y debilita la superficie del diente, lo que los hace más propensos a la caries. Por ello, conviene esperar 30 minutos para cepillarnos los dientes, ya que la boca vuelva a sus niveles seguros de acidez.

Los alimentos que se consumen durante las tres comidas principales resultan menos dañinos para los dientes debido a que se libera más saliva, la cual, ayuda a reducir los efectos de los ácidos.

Así que mientras más se coma entre horas, más períodos de acidez habrá en la boca. Por ello, es conveniente que, además de esperarnos 30 minutos para cepillarnos los dientes después de comer, evitemos comer tentempiés.

Un método para cepillarse los dientes

La mayoría de la gente deja algunas partes de la superficie de los dientes sin cepillar debido a que lo hacen de manera aleatoria. Para hacerlo correctamente se recomienda tener un método: empezar en una esquina de la boca e ir cepillando lentamente uno por uno cada diente de arriba abajo hasta llegar a la otra esquina.

Además de la técnica, existen una serie de aspectos que se deben de tomar en cuenta para garantizar la efectividad del cepillado:

• El cepillo de dientes debe ser reemplazado cada 2 o 3 meses.
• Es recomendable utilizar una pasta dental con flúor.
• El tamaño del cepillo debe de escogerse en función de la edad de la persona.
• El mango del cepillo debe ser ergonómico para un mayor control del movimiento.
• Los extremos de los filamentos deben ser redondeados y texturizados para evitar dañar el esmalte dental y la encía.

Además de cepillarte los dientes con una buena técnica y cuidar la alimentación, es importante procurar usar, al menos una vez al día, hilo dental.

¿Cuándo consultar con el dentista?

Para prevenir enfermedades periodontales y otros problemas de salud bucal, programa con tu dentista limpiezas y revisiones regulares que incluyan radiografías.

Mientras tanto, ponte en contacto con el dentista si notas cualquiera de estos signos o síntomas:

• Encías enrojecidas, sensibles o inflamadas
• Encías que sangran cuando te cepillas los dientes o usas hilo dental
• Encías que comienzan a separarse de los dientes
• Dientes flojos
• Sensibilidad inusual al frío o calor
• Mal aliento persistente o un sabor inusual en la boca
• Dolor al masticar

Recuerda que la detección temprana de la enfermedad periodontal y otras afecciones bucales pueden ayudar a conservar tu dentadura sana por muchos años.

Nota aclaratoria: la información proporcionada en este blog es de carácter informativo y no debe tomarse como medio de diagnóstico o tratamiento.